Ingredientes (6 personas)
- 2 perdices
- 500 gramos de judiones o fabes
- 3 cebollas medianas
- 1 pimiento rojo
- 3 dientes de ajo
- 1 vaso de vino blanco
- pimentón dulce (dos cucharaditas de postre)
- 2 hojas de laurel
- aceite y sal
Elaboración
Las bravas patirrojas nunca nos lo ponen fácil y hacerse con un par de ellas, al menos nos va a costar una buena sudada! Y más en esta temporada que estamos viviendo, en la que el sol nos acompaña en casi todas las jornadas!
Y después de esta breve intro al más puro estilo Jara y Sedal... vamos al lío!
Una vez que tenemos limpias y troceadas las perdices, las añadimos un poco de sal y ponemos aceite en una sartén para dorarlas (y adorarlas):
Una vez doraditas, las pasamos a una cazuela y, en ese mismo aceite de la sartén echamos cebolla y media picada y un poco de sal. Cuando la cebolla empiece a coger colorcito añadimos el pimiento rojo picado:
Y mientras vamos machacando en el mortero los dientes de ajo y luego echamos el vino blanco y el pimentón dulce. Cuando el sofrito de la sartén esté listo añadimos el contenido del mortero y un vaso de agua.
Lo dejamos 30 segundos y retiramos del fuego. Pasamos el contenido de la sartén al vaso de la batidora y le damos candela (bate que bate...). Seguidamente lo volcamos a la cazuela donde están las perdices y lo ponemos a fuego lento durante dos horas y media.
Transcurrido ese tiempo y si vemos que la carne está blanda, llega el momento de mancharse las manos y desmigar la carne, reservad también la salsa de la cazuela (ni se os ocurra tirarla!!):
Vamos ahora con los judiones! Las ponemos en una cazuela con una cebolla entera (pero pelada), laurel, cucharadita de pimentón, chorrito de aceite, sal y agua. A fuego lento durante dos horas.
Pasado ese tiempo añadimos las perdices y la salsa. Un minutito dando vueltas y ya está listo para servir. Al ataque!
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